Hay que tener en cuenta que el bosque en esa época era muy extenso y ocupaba gran parte de lo que hoy son cultivos, por lo que asentarse en la proximidad del río no era fácil, además el riesgo de inundaciones era muy grande.
Tampoco conocemos cual era el cauce del río en esa época, lo que sí sabemos es que no era el mismo que hoy, pues todos sabemos la tendencia del río a cambiar de cauce, es lo que se conoce con el nombre de «curso medio meandriforme».
La primera referencia del lugar se tiene en época árabe, justo antes de su reconquista, enel año 1091 el rey de Aragón, Sancho Ramírez, dio al monasterio de Sauve-Majeure los diezmos de Ejea y Pradilla para cuando se conquistasen. Unos años después toda la comarca caerá en manos de los reyes cristianos, y en 1118 Alfonso I el Batallador conquista Zaragoza, entrando desde el actual barrio de Juslibol, habiendo cruzado el Castellar desde el castillo de Sora.
¿Qué población tenía entonces Pradilla y qué fue de ella? Sabemos que la zona estaba prácticamente deshabitada. En el caso de Tauste se dio un gran esfuerzo por parte del rey para atraer población a la Villa. La Carta Puebla contiene una serie de privilegios para todos los habitantes de Tauste y para aquellos que quisieran venir a vivir allí.
En Pradilla posiblemente vivieran cinco o seis familias dedicadas al cuidado del castillo y a la vigilancia del Ebro, esas mismas familias continuarían después de la reconquista, eso sí cambiando de religión, como ya hicieran sus antepasados.
La evolución histórica sobre pertenencia y división administrativa de la localidad sufrió diversas modificaciones: se llamó Pradilla hasta 1860 y desde 1873 se conoce como Pradilla de Ebro. Entre 1154 y 1337 tuvo el nombre de villa.
Se vio afectada junto con la comarca de las Cinco Villas en las guerras entre navarros y aragoneses durante el siglo XII. Durante el siglo XII debió ser tierra de realengo hasta que en 1154 el rey de Navarra dio a Doña Ezo el castillo y villa de Pradilla, confirmado en 1159 por Ramón Berenguer IV. Debió volver a manos reales, porque en 1170 Alfonso II dio a la Orden del Temple todo lo que tenía en Pradilla. Con la expulsión de la orden vuelve a manos de Pedro II, Desde entonces pertenecerá continuamente a diversas familias nobiliarias.